11.2.2009
Proyecto urbano y arquitectónico para el área de la Estación de Parma, II fase
La reflexión sobre la ciudad contemporánea como lugar de convivencia de usos y actividades distintas nos ha llevado a la conclusión que para crear un nuevo tramo de ciudad era necesario mezclar usos diferentes en los edificios.
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La planta baja acoge comercios, la primera, oficinas y desde la segunda hasta la cuarta hay vivienda. Los accesos a las diferentes actividades son independientes.
Esta complejidad de usos se refleja también en la imagen del proyecto. La planta baja es la planta pública, el lugar de las relaciones sociales y de las conexiones urbanas. Totalmente transparente y permeable acoge los comercios y los equipamientos. Se retranquea de la línea de fachada de los edificios generando un porche en voladizo de profundidad variable. La primera planta recupera el frente urbano a través de una galería continua que genera los accesos a las oficinas, como una vía pública en el interior del edificio. A partir de la segunda planta el cambio en la volumetría denuncia el cambio de uso a viviendas. Un edificio se curva y se levanta, mientras que el otro se divide en dos núcleos distintos apoyados en la planta común de oficinas.
La torre es el elemento focal de este conjunto urbano, alrededor de la cual los edificios se moldean y se alejan para encontrar un equilibrio.