Mirrors, en Japón

Utilizando esta ubicación, hicimos intencionalmente refracciones repetidas del árbol. Con el fin de amplificar los cerezos, se ubicaron dos paredes de espejos en un ángulo, haciendo un bosque de cerezos en un rincón de la ciudad. La superposición de los cerezos y los reflejos con una urdimbre invitan a las personas al bosque. Además, desde la cafetería se puede ver las cerezas reales y las reflejadas al mismo tiempo, y sentir cerca el cambio de estación. Especialmente, puntales del techo verticales del motivo de la rama de un árbol, dan la sensación de un descanso bajo el árbol.El muro exterior es de acero blanco enchapado de gálbano. La puerta de entrada es roja. La pared interior de color rojo y verde. Cada diseño y color implica estar en el bosque intencionalmente.

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