27.4.2020
Liceo Francés de Madrid
El proyecto consiste en la construcción de la nueva escuela infantil de 21 aulas destinada a niños de 3 a 5 años, para el Liceo Francés de Madrid.
Para contar la historia de este proyecto, nos dijimos « nada mejor que una pequeña clase de matemáticas ¡”.
Había un dato de entrada bastante simple: una escuela infantil de 21 aulas. Algo totalmente inédito hasta la fecha, ¡por lo menos para nosotras!
Entonces 21 aulas, acogiendo hasta 28 niños cada una, o sea un total de 588 alumnos, e igual de pares de ojos para admirar el resultado final…
588 alumnos, o sea 1176 piernas, y no cualquier piernas, sino que “mini-piernas”.
A partir de esta primera conclusión, nos dimos como objetivo de reducir al máximo las distancias de los recorridos entre las aulas y los patios. Nos fijamos una distancia máxima de 30 metros. 30 metros / 4 veces al día / cada día del años escolar, da un total de 22.8km, o sea 70 150 mini-pasos solo para recorrer los pasillos (sin contar con los miles de kilómetros recorridos a dar vueltas en todos los sentidos de los patios de recreo). Estas circulaciones, las hemos previsto generosas y luminosas, puntuadas de placitas para las pequeñas paradas-merienda en el camino.
588 alumnos, son también 85 tasas de baños, o mejor “mini-tasas”, a colocar dentro del edificio. Tratándose de lugares de aprendizaje al mismo nivel que las aulas, hemos tratado los sanitarios con un especial cuidado, a través de la iluminación natural, del tratamiento colorado, y de la ergonomía.
En fin, otro dato, y no de los menores : 588 alumnos son también 5880 dedos, potencialmente un poco sucios, con una gran curiosidad de la materialidad. Hemos entonces elegidos materiales contrastados y virtuosos … y más que todo, fáciles de limpiar ¡
Todas estas pequeñas manos, con la ayuda de las grandes manos de sus profesores, serán también las herramientas que manipularan este edificio, que ha sido pensado como un soporte educativo, en el sentido que los futuros usuarios estarán invitados a volverse actores de su bien-estar. Los sistemas mecánicos han sido privilegiados a los sistemas automatizados, también para asegurar una mejor resiliencia de la construcción.
El edificio funciona integralmente en ventilación natural y el control solar esta resuelto a través de sistemas fijos, haciendo parte integra de la arquitectura.
El edificio esta organizado como una “Z”, generando 2 patios : uno para la gran sección, otro para las secciones de los pequeños y de los medianos, en el volumen central se ubican los espacios comunes como la administración y las salas de motricidad. Este volumen estará revestido de una doble-piel de aluminio anodizado, cuya obra deberá realizarse en el verano del 2020.