1.5.2025
Casa en Praia do Forte
Situada en una parcela plana de 1260 m2 a solo 300 metros de la playa, en una región costera de 'restinga', esta casa también se encuentra cerca del centro del Proyecto Tamar, reconocido por sus largos esfuerzos en la conservación de las tortugas marinas.
El diseño longitudinal de la casa maximiza las vistas a las áreas protegidas de restinga con su singular flora regional. Se organiza en tres bloques programables independientes:
Bloque social: La sala de estar, el comedor y la cocina se integran completamente con el exterior mediante ventanas retráctiles de vidrio, transformando el espacio en una amplia terraza con vistas a la piscina y al solárium.
Bloque de dormitorios principales: Además del dormitorio principal y el baño en la planta baja, este bloque también incluye un estudio y un taller en la planta superior, cada uno con vistas opuestas.
Tercer bloque: Este bloque, de mayor tamaño, alberga los demás dormitorios [para las hijas de la pareja], las habitaciones de invitados y las áreas de servicio. También se organiza en dos niveles con vistas frontales y traseras de la propiedad.
Los tres bloques están conectados por un eje central de circulación, y sus niveles están desnivelados por medio tramo de escaleras. Esto significa que desde el nivel de la piscina, solo se necesita medio tramo de escaleras para llegar al nivel inferior, y lo mismo ocurre con el nivel superior. Las habitaciones de la planta baja de ambos bloques están parcialmente hundidas, creando un ambiente más confortable y diverso en comparación con las habitaciones de la planta alta. Asimismo, el bloque social de la planta intermedia ofrece vistas amplias y fácil acceso a otras zonas de la casa.
La casa cuenta con una base de piedra natural local que conforma el solárium, la piscina, los jardines de entrada y los muros de contención de las habitaciones.
Sobre esta base de piedra se construye una estructura de hormigón armado. Consta de seis muros de hormigón de 3 metros de altura que definen los bloques del programa. Estos muros se extienden más allá de los espacios interiores para formar jardines en cada zona. Los muros tienen 20 cm de espesor y un acabado de hormigón visto, protegido con un impermeabilizante. Soportan las losas de la planta alta, las jardineras en las fachadas y, en el eje central, un gran canalón para la recogida de aguas pluviales.
La última capa de construcción consiste en los techos y las lamas de protección solar, que se apoyan en la estructura de hormigón y son todos de madera. Los techos de tejas tienen planos que dirigen el agua de lluvia hacia el canalón central.
Con 630 m², esta casa de playa es una contribución contemporánea al paisaje costero de Mata de São João.
Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/house-in-praia-do-forte.html
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