4.7.2014
Villa Wienberg, en Dinamarca
Fue la unión de las fuerzas creativas y los sueños de los arquitectos Mette y Martin Wienberg que llevó a este emocionante y poco tradicional marco conceptual en torno a su vida familiar.
Atmósfera fue la palabra clave y contraste un instrumento importante: Al crear una entrada cubierta con un estilo bastante estricto, donde predomina la madera negra y el hormigón, quisieron mejorar la experiencia del movimiento desde la serenidad arquitectónica hacia el jardín abierto – que se estructura orgánicamente, pero bien definido por los durmientes en relieve que enmarcan y contrastan el blando césped, que descansa en su abrazo casi como un lago verde.
Las plantas y los árboles son esenciales para el diseño: Todos los canteros están cubiertos de corteza triturada gruesa, con el fin de mejorar la ilusión de «La pequeña casa en el bosque» y el mosaico natural del follaje crea patrones cambiantes de sombras y filtra la luz: Esta pareja no buscaba el gran panorama, sino más bien una dinámica variedad de interesantes vistas, que traen un ambiente único a cada habitación.
Texto por: Susanne Holte
Visitá el texto original en inglés > http://bit.ly/1qTLwhZ