3.1.2023
Trafilerie Mazzoleni: nuevo centro de administración en Bérgamo
Un edificio contemporáneo con formas esenciales y texturas cambiantes
En el centro de este proyecto se encuentra el centro de administración de Trafilerie Mazzoleni, una fábrica de alambre histórica que produce alambre de acero y otros productos metalúrgicos, ubicada en el corazón de Bérgamo y ha estado en funcionamiento durante más de un siglo. El diseño del proyecto se coloca completamente en seco y se define por una forma esencial marcada por la alternancia de tonos claros y oscuros, así como una textura que cambia con la dirección de la luz solar.
El nuevo edificio, construido en el sitio original, entrega un nuevo bloque de oficinas para el vasto complejo industrial como parte del proceso de regeneración de toda el área urbana, que comenzó con la remodelación del Estadio Gewiss.
El diseño arquitectónico reinterpreta la forma de la bodega original en desuso, caracterizada por un trazado singular, alargado y angosto, y se convierte en el renovado perímetro del inmueble al costado de la nueva plaza a los pies del estadio. La zona industrial, establecida a principios de 1900, estaba originalmente rodeada de edificios que impedían el diálogo con la ciudad en expansión, que ahora la ha incorporado.
En su evolución, el proyecto mantiene su identidad como frontera y al mismo tiempo busca un nuevo diálogo con la dimensión pública de la ciudad. Esto se logra mediante la posición retranqueada en relación con la vía de acceso principal, creando así un pequeño espacio urbano.
El edificio es una forma esencial, sin aleros, el arquetipo contemporáneo de una fábrica, y al mismo tiempo es dinámico gracias a una superficie exterior en constante movimiento. Las sombras cambiantes de un tejido de botones es la expresión de la energía activa dentro de la planta de fabricación.
Desarrollada en dos niveles y compuesta por dos unidades de 500 m2, la construcción fue diseñada utilizando sistemas prefabricados para reducir el tiempo de finalización a ocho meses en total. Se construye mediante una estructura metálica modular, con un marco regular que influye en el de la fachada, mientras que la cubierta se desarrolla con un sistema de cassettes de acero prefabricados que se utilizan aquí por primera vez en Italia.
La alternancia de paneles de hormigón armado texturizados blancos y los marcos de las ventanas bruñidas otorgan a la fachada un papel principal en la composición de la estructura. Los paneles se diseñaron utilizando matrices personalizadas. Las superficies alternas lisas, grabadas al ácido y texturizadas se vuelven protagonistas en relación con la posición del sol.
Los marcos de puertas y ventanas, realzados por intradós estrechos, se alternan con los paneles de fachada y se completan con un encofrado corrugado trapezoidal que ayuda a compensar el desnivel interno de la losa del piso y el revestimiento. La entrada principal del edificio, en el frente estrecho, está totalmente acristalada y protegida por una lámina de listón bruñido que sigue la forma de la perspectiva recordando el material de las inserciones de la fachada longitudinal. Un marco ininterrumpido de cuerpo entero hace que la entrada sea permeable a la vista y le confiere la connotación de un portal.
Los interiores de las oficinas tienen un carácter esencial; la estructura y los sistemas se dejan deliberadamente expuestos, dando al espacio de oficinas una sensación industrial y acogedora. El impacto cromático se basa en alternar el color blanco del acabado con el color oscuro de los pisos y ventanas, mientras que destaca la característica escalera de hierro verde.
Una construcción industrial compacta y refinada que reaviva el diálogo con la ciudad.
Una palabra de CAPITANIO: «Este proyecto estaba destinado a favorecer la relación entre la planta de fabricación más grande todavía presente en un área central de Bérgamo y sus alrededores. El papel de la industria dentro de la ciudad experimentó transformaciones notables en los últimos cien años. Desde su privilegiado posición y promoción en el período inmediato de la posguerra, fue empujado hacia el exterior. Sin embargo, está volviendo a las agendas políticas con la intención de mejorar lo que queda y alentar el retorno de nuevas dimensiones industriales».
Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/trafilerie-mazzoleni-new-administration-centre-in-bergamo.html
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