Residencia Northside

Los propietarios son una familia joven, compuesta por David Kaplan, cofundador del aclamado bar de cócteles Death & Co., su esposa, Jenna, ejecutiva de relaciones públicas, y su hija de cuatro años. AAmp colaboró ​​estrechamente con David y Jenna en su anterior hogar en Jackson Hole, Wyoming, además de diseñar los locales de Death & Co en Denver, Los Ángeles, Washington D. C. y, más recientemente, en Seattle, que actualmente se encuentra en desarrollo. Los clientes, a quienes Armstrong y Ashey conocieron hace diez años cuando vivían en Los Ángeles, se mudaron recientemente de Jackson Hole a la región de Seattle para estar más cerca de su familia y experimentar la vida urbana sin dejar de estar inmersos en la naturaleza, un atractivo de la zona de Bellevue. Dado que viajan con frecuencia, la proximidad al aeropuerto internacional de Seattle-Tacoma también fue una ventaja. La casa existente atrajo a los clientes por su encanto clásico de mediados de siglo, con amplios ventanales que conectan a la perfección el interior con su entorno natural. Aunque las renovaciones de las décadas de 1980 y 1990, lamentablemente, eliminaron gran parte de la carpintería original en zonas como la cocina y los baños, la estructura de la casa se mantuvo en muy buen estado. La casa se encuentra en un barrio de densidad media, pero gracias a su estratégica ubicación entre la ladera y los árboles circundantes, la envolvente acristalada permite disfrutar de las vistas de la naturaleza sin comprometer la privacidad.

El objetivo principal de AAmp fue una renovación general con modificaciones en la distribución y el diseño interior. Las renovaciones anteriores habían reducido la distribución en algunos puntos, impidiendo la entrada de luz natural al centro de la casa. La circulación era redundante y, en algunos lugares, incómoda; por ejemplo, al tener que pasar por un baño para ir de la oficina a la cocina. AAmp reconfiguró la distribución espacial para mejorar la circulación, aumentar el espacio útil y permitir que la luz natural penetrara más profundamente en la casa. Se instalaron nuevos muebles, acabados, accesorios y electrodomésticos en las tres plantas.

Se derribaron las paredes de la cocina y el pasillo adyacente para dar paso a una cocina más grande y abierta. Anteriormente cerrada, ahora está completamente abierta al salón y la sala de estar, con una gran isla en el centro. El baño completo entre la cocina y el despacho se redujo a un tocador para facilitar la circulación. Ahora parte de la cocina, el espacio que antes ocupaba la antigua ducha se convirtió en una despensa.

Anteriormente, no había un rellano ni un armario en la entrada; se reconfiguraron moderadamente las paredes adyacentes del despacho y se colocaron unas sencillas carpinterías con espacio para guardar abrigos y zapatos, junto con un banco, cerca de la entrada. Armstrong comenta sobre el diseño de interiores: “Los clientes se enamoraron de la casa por su encanto de mediados de siglo, pero no querían exagerar. Al pertenecer al mundo de la hostelería y la coctelería, tienden a preferir colores más oscuros y espacios evocadores, pero también querían introducir elementos más lúdicos a través del color y los estampados, sin perder ni competir con la estética de mediados de siglo.

Por ello, los espacios más acogedores de la casa, como la sala de estar y el dormitorio principal, se trataron con colores más oscuros y texturas suaves, como paredes encaladas y cortinas de felpa. En los espacios más funcionales y comunes, como la entrada y la cocina, se aplicaron tonos más claros, colores y estampados más brillantes. En todos los espacios, el exuberante fondo de los árboles fue un elemento complementario”.

En la sala de estar, donde una exuberante vegetación envuelve el espacio, las paredes encaladas de color carbón y una chimenea de piedra oscura se acentúan con muebles en tonos tierra, como un sofá naranja quemado y una alfombra estampada en gris cálido. Frente a la entrada se encuentra una lujosa banqueta empotrada color índigo, sillas turquesa y una pared malva que da paso a la luminosa y espaciosa cocina y el desayunador, con encimeras y salpicadero de piedra gris claro, gabinetes de chapa de roble y suelos de baldosas Cle blanco y tostado. El desayunador adyacente cuenta con una banqueta azul intenso a medida, una mesa tulipán clásica de estilo mediados de siglo y sillas de alambre, todo ello respaldado por una vibrante pared de galería y vistas al exterior a través del ventanal adyacente de suelo a techo.

Los clientes tienen una hija pequeña y una familia numerosa que los visita, por lo que acomodar a ambos fue un aspecto programático importante. Para su hija, la carpintería extravagante, que incluye una estantería de media luna a medida, pintura y papel tapiz, ayudó a definir un pequeño dormitorio, mientras que la habitación de invitados adyacente y el baño privado para la familia se trataron en suaves tonos rosados ​​y texturas lujosas de inspiración hotelera.

La segunda planta, que ahora alberga exclusivamente la suite principal, se reconfiguró por completo. Una pequeña habitación adyacente al dormitorio principal se convirtió en un segundo armario para Jenna, y el baño se reconfiguró para una mejor circulación visual y programática, incorporando lavabos dobles y una ducha de vapor. Ashey comenta: «Los clientes suelen bromear diciendo que la mejor decisión que tomaron en la renovación fue tener sus propios armarios, sobre todo en lo que respecta a sus prácticas individuales de empaque/desempacando entre sus frecuentes viajes”. La suite principal refleja la inclinación de los propietarios por tonos más oscuros y sombríos, con carpintería y paneles de pared teñidos de negro, y pintura color carbón en paredes y vigas. Las lámparas colgantes DP3 ANDlight Orbit acentúan la cama a ambos lados.

La planta baja, ubicada debajo de la sala de estar y el comedor, se abrió para una mejor circulación hacia la planta superior. Esta planta alberga el estudio/sala de juegos, el gimnasio, el bar y la lavandería. El espacio, con un amplio acristalamiento, se abre directamente al patio exterior mediante una gran puerta que conecta el interior con el exterior. La chimenea está revestida con Benjamin Moore Midnight Oil, un tono negro intenso, y la selección de muebles incluye piezas de inspiración de mediados de siglo que se yuxtaponen con un sofá y un puf contemporáneos.

Ashey comenta: “Si bien la estructura original ofrecía un maravilloso telón de fondo para el amor de los clientes por los espacios de hospitalidad cálidos y lujosos, buscamos realzar eso con nuestra elección de telas, colores, muebles y accesorios de alta calidad en toda la residencia”. “Diseñamos la casa para que fuera un verdadero refugio para ellos, un lugar para comunicarse, descansar y disfrutar de la naturaleza”.

Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/northside-residence.html