14.9.2017
«Estratos activos»: Nuevos modos de habitar – Manzana verde Málaga
ESTRATOS ACTIVOS es la estrategia con la que producir ciudad mediterránea integrada, adaptable y sensible con los ciclos de vida de sus componentes.
El objetivo pasa por entender la ciudad como un sistema estratificado y multiescalar que ha de gestionar de forma sincronizada los mecanismos de contacto, regulación, intercambio, comunicación o adaptación de sus componentes.
El proyecto incorpora por un lado las inteligencias múltiples que se han dado en torno a la cultura mediterránea durante siglos: la materialidad híbrida, el carácter hedonista, la termorregulación del jardín árabe, el pensamiento democrático y la diversidad o la integración; proponiendo una estrategia general basada en la estratificación y evolución en el tiempo a partir de 4 vectores que han de servir, al mismo tiempo, como guías e indicadores de la sostenibilidad de la actuación: complejidad urbana, metabolismo urbano, biodiversidad urbana y cohesión social, habitabilidad del espacio público y movilidad sostenible.
Complejidad urbana
La complejidad urbana es fundamental para la pervivencia de la ciudad mediterránea y su existencia se promueve en las diferentes escalas del proyecto.
Jardín/habitación
El trazado reticular del espacio público, basado en la lógica del jardín árabe, permite la creación de recintos especializados que funcionan como salones exteriores con programas diferenciados. La organización espacial también permite sistemas de gestión alternativos que compatibilicen zonas de gestión pública (zonas recreativas, jardines contemplativos) y zonas de gestión de las comunidades de vecinos (espacios productivos, huertos comunales).
Edificio/Paisaje
Con genética de paisaje, el edificio cuenta con forjados equipados que se comportarán como parcelas preparadas para ser desarrollados por agentes independientes. El potente esqueleto distribuirá las instalaciones urbanas y al mismo tiempo definirá la escala en relación con el barrio. Sobre los forjados/solares se podrán ubicar programas heterogéneos de viviendas adaptadas, viviendas taller, comercios, negocios, áreas de esparcimiento o comunicaciones.
Metabolismo Urbano
Se propone una estratificación y una adaptación vertical del funcionamiento térmico del edificio en función de sus intercambios energéticos. En los estratos inferiores la regulación térmica se ve apoyada de forma pasiva por los procesos de evapotranspiración y el enfriamiento adiabático del jardín urbano estratificado. A partir de los 20/30 metros, los mecanismos se modifican para adoptar una gestión sensual y activa de los sistemas de protección solar, basado en los umbráculos, soportes textiles y emparrados. La estratificación vertical también se produce desde el punto hídrico. Hundir las zonas plantadas ayuda a ser más eficaces los recursos hídricos, acercando las raíces de los árboles al nivel freático disminuyendo la dependencia del riego.
Biodiversidad urbana y cohesión social
Con la estrategia de paisaje se busca crear un ecosistema maduro con índices altos de biodiversidad y para ello se propone la plantación de una vegetación por estratos que permitirán crear un efecto oasis. Los tres niveles de vegetación (porte alto, medio y bajo) permite la creación de un de microclima que garantiza la supervivencia de las especies más lentas y vulnerables y al mismo tiempo garantizan la atracción de gran variedad de fauna. El estrato arbóreo reduce la insolación y con el resto de estratos, se reduce la evapotranspiración por el viento. Los árboles traspiran y así el aire fresco, desciende al mismo tiempo que produce sombra. Se ha pensado en utilizar especies vegetales de carácter productivo como los frutales en los portes altos y medios y arbustos de variedades comestibles y huertos en los portes bajos para que en los sistemas de mantenimiento y cuidado estén involucrados los habitantes.
Habitabilidad del espacio público y movilidad sustentable
Se busca reducir la capa profiláctica de pavimentos que cubren la ciudad y potenciar los suelos porosos y permeables. Los escenarios tendenciales a largo plazo apuntan a la desaparición del vehículo particular y la aparición de sistemas de movilidad compartidos. Estos escenarios anuncian una reducción considerable de las plazas de aparcamientos necesarias por habitante. El proyecto propone minimizar las plazas de parking enterradas con poca utilidad en el largo plazo y por el contrario desarrollar sistemas aéreos de fácil desmontaje que permitan dejar bolsas de espacio apropiables en el futuro para otros usos. A corto plazo, la conexión de los aparcamientos con los jardines y la incorporación de dobles alturas permiten la existencia puntual de usos alternativos.