9.10.2017
Lanzarote Music Factory, 1er. Premio
Un proyecto urbano. La construcción de un hito, un espacio de carácter público que congregue y sea soporte de nuevos procesos de inclusión social con la suficiente energía propia para reverberar en la trama a favor de una activación futura del sector.
Un imaginario colectivo posible para el borde de la ciudad que trabaje a través de la (o) posición territorial, como un par programático-funcional, con las dinámicas asociadas a la extensión lineal existente sobre el borde costero producto de la presencia pregnante del mar y su horizonte infinito en los imaginarios colectivos de la isla. Y que promueva en las tensiones subyacentes que genera, la posibilidad de activar la transversalidad, el espesor del entorno urbano, los intermedios que vinculan las dos situaciones para dar lugar a nuevos sistemas y dinámicas capaces de alterar positivamente el entramado.
Entendemos el proyecto Lanzarote Music Factory como la oportunidad de generar las costuras sociales, culturales y económicas necesarias para activar el sector urbano involucrado. Un proyecto urbano. Ubicado en un padrón específico pero vinculado a una narrativa territorial más amplia.
En tanto activador, que contenga y de soporte, que apoye los fenómenos de manifestación cultural y artística desde la especificidad tecnológica y las infraestructuras que sirvan para el uso colectivo. Una intervención que proponga el intercambio y diluya los límites espaciales duros a favor bordes blandos, adaptables e indeterminados. Permeables. Un espacio público abierto con la capacidad de ser apropiado y modificado por el usuario. La intervención se plantea como axioma base la reutilización de la totalidad de los elementos constructivos y estructurales existentes, así como la permanencia de la construcción original para darle una dimensión histórica con el fin de incorporar el rastro evocativo de las antiguas infraestructuras en la experiencia propuesta.
El activador principal de la propuesta está formalizado a través de una gran placa que sobrevuela las estructuras existentes. Un elemento liviano, ingrávido que se propone generar un extrañamiento de la experiencia sensorial a través de su escala, materialidad y la activación de los espacios interiores y exteriores que devienen de elementos técnicos desplegables a partir de su propio espesor. Por momentos un teatro o una isla de audífonos, un cielorraso de luminarias, un perímetro textil, incorporando la tensión temporal, los programas efímeros y la indeterminación formal como parte de la genética proyectual propia.