Palacio de Exposiciones y Congresos, Centro Cultural

La parte ahora construida se introduce en el bosque de pinos, se inserta en el terreno, prolongando hacia el exterior las actividades de lo congresos. Todo el conjunto pretende recobrar el carácter simbólico de los lugares intermedios genuinos de la isla de Ibiza: un interior que es exterior para la sala de exposiciones; la mampostería que limita las lindes el paisaje convertida en un apilamiento para la fachada; la luz natural presente en todo el edificio, incluso como fondo escenográfico; y la creación de una topografía artificial que transforma el territorio e  introduce un recorrido en el edificio, con una nueva línea de horizonte hacia el bosque y, aunque invisible, hacia el mar.