23.6.2015
Pabellón de Mónaco, en la Expo Milán 2015
El desarrollo futuro depende de ser consientes que la prosperidad alcanzada a través del tiempo, puede contribuir a la promoción de la solidaridad, la protección del medio ambiente y a lograr un crecimiento sostenible.
El Pabellón de Mónaco 2015 destaca la solidaridad y el intercambio, ya que presenta una nueva visión de cómo nos alimentamos del planeta. Cooperación, gobierno y educación son los tres principios rectores del mensaje del pabellón. Cooperación para el mejor reparto de la riqueza internacional; gobierno entendido como la oportunidad de dar incentivos para políticas responsables que apoyen de la investigación y la innovación; educación como un recurso esencial para el futuro, capaz de crear conciencia.
Con sus 1.000 metros cuadrados, fue diseñado por el arquitecto italiano Enrico Pollini y se compone de una serie de contenedores que se encuentran bajo un techo laminado de madera, que imita la forma de una enorme carpa. La estructura está cubierta por un jardín colgante de unos 500 metros cuadrados.
El objetivo del proyecto es hacer hincapié en la innovación, para el fomento de una nueva y mayor sensibilidad ambiental. El contenedor es el medio más utilizado en el mundo para el transporte de mercancías y, como tal, es emblemático del comercio y el intercambio. La idea de la Madre Tierra es revivida a través del uso de la vegetación y las muchas especies de plantas que dibujan las líneas de los cinco continentes, para representar la universalidad que caracteriza Expo 2015.
El constructor general del Pabellón de Mónaco es ES-KO, una compañía de Monte Carlo que se especializa en la construcción de estructuras modulares. Se ha puesto en marcha una nueva empresa llamada Eco System para la realización del proyecto.
El interior del Pabellón de Mónaco está hecho de pilas de cajas de transporte de madera apilados unas sobre otras, para simbolizar las iniciativas y acciones que, gracias a la Expo 2015, estarán listas para la exportación a todo el mundo. Los visitantes pueden ingresar a través de una serie de diferentes entradas, que a su vez reflejan la multiplicidad de puntos de vista hacia el medio ambiente, el reciclaje, la pesca sostenible, la deforestación, los problemas que aquejan a los océanos y los programas de cooperación que ya se han emprendido sobre en Madagascar, Burkina Faso y Mongolia.
El tema de reciclaje también verá la puesta en marcha de nuevas iniciativas al finalizar la Expo Milan 2015. El conjunto se ha estructurado para ser desmontado y reutilizado en Burkina Faso, como sede operativa para la Cruz Roja.
Visitá el texto original en inglés > http://bit.ly/1TKQFIm