Oficinas Corporativas Alsea

Alsea es una empresa que constantemente está afrontando cambios en su estructura y operaciones, por ello se buscó mejorar la comunicación y la flexibilidad de los espacios. El resultado es un conjunto ordenado y modulado de acuerdo a la organización de la empresa.

En complemento a las áreas de trabajo, se propusieron «nodos de servicios», cuya función es provocar las reuniones informales y proveer barras de impresión, copias y café. Estos «nodos» tienen una función explícita y dotan a cada área de identidad propia. Cuando los usuarios las recorren, el espacio evoca una pequeña tienda con toda la imagen de su marca. Esto representa la esencia de los negocios de Alsea.

El concepto de cada «nodo» también es llevado a la siguiente escala, que incluye los privados y las estaciones de trabajo, los cuales son agrupados y diferenciados del resto, de una forma sutil y cromática.

Una característica peculiar del tercer nivel es la extensión aproximada de 3.300 M². Lo común hubiera sido crear un concepto tradicional de oficinas que redundaran en monotonía y repetición. En lugar de eso, se decidió aprovechar esta característica para crear recorridos y remates visuales. De tal manera que al caminar se vayan descubriendo diferentes espacios, que rompen con la imagen preconcebida de una oficina habitual.

El jardín zen es muestra de ello; su trazo lleva de la mano al usuario en el inicio del recorrido convirtiéndose en un mensaje de bienvenida.

En medio del jardín zen se descubre una sala de juntas habilitada para videoconferencias, la cual se accede a través de un puente.

Existen otros remates visuales que funcionan como «nodos» secundarios, y complementan la función de los que identifican a las marcas. Estos logran dar unidad visual al Corporativo y proponen materiales especiales.

Por su parte, el segundo nivel cuenta con doble altura, lo que se aprovechó para poner un mezanine donde se encuentra la sala de consejo. Éste se conceptualizó como una caja de cristal, sobre la cual está grabada la visión de las marcas, y donde la interacción del interior con el exterior resulta abierta, cuidando así de la privacidad. Esta área representa la nueva cultura de la empresa.

Este afán por una experiencia nueva resultó en un área que espera al siguiente usuario que debe ser alguien que no quiera pensar igual a los demás.