Back Office Alsea

El reto de este proyecto es lograr que la imagen del back office sea la misma a la del corporativo, cuidando que el gasto por metro cuadrado sea mucho menor tanto en la inversión inicial como en los gastos mensuales, de tal forma que a la percepción del usuario, la única diferencia entre el corporativo y el back office será la ubicación.Se buscó que el recorrido de las oficinas se convierta en una experiencia así como las marcas de Alsea lo son para el consumidor. De esta manera, todos los empleados pueden entender la esencia del negocio y esto, a su vez, se transforme en un mejor servicio al cliente.

El diseño se basa en áreas abiertas. Se optó por el sistema de instalaciones aparentes, sobre las cuales flotan tableros de plafón, cuyo diseño desalineado con respecto a las estaciones de trabajo generen una imagen diferente a la oficina tradicional.

El manejo del color es fundamental en este proyecto y se refleja en los acabados, ya que el blanco de los plafones contrasta con la saturación cromática de la alfombra y esto se equilibra con los acentos de color en muros y paneles de mobiliario.

La ubicación del comedor, como espacio principal de convivencia, fue planteada para tener contacto visual directo con el edificio de Reforma 222, dónde se encuentra el corporativo y está diseñado para crear un ambiente más relajado que el de las oficinas a través de los colores en muros y sillas.

Existen áreas como las salas de juntas informales y los phone boots, que logran hacer que el proyecto no se sature de áreas de trabajo. Este tipo de espacios permite que la calidad en la comunicación entre los empleados sea mejor. Para separar esta área de la de trabajo se diseñó una celosía de madera que funciona como filtro y separa sutilmente un espacio del otro.