Dando calor a la piel del edificio “El mundo de Gio Ponti”, el padre del diseño italiano moderno

Ponti es un modernista que explora las superficies arquitectónicas integrando el trabajo artesanal con la producción mecánica, con el fin de comunicar «la sensación de la piel», como su textura y su calidez. Cuatro temas fueron claves para la interpretación de la exposición: «pared interior», «ventana», «piso» y «muro exterior».

Al hacer uso de la excelencia de la técnica del laboratorio local Monozukuri Koubou, hemos tratado de replicar el trabajo del azulejo de Ponti. Al dividir el espacio en varias zonas colocando vagamente paredes como un pliegue y cambiando su altura hacia arriba y abajo, cada sala de exposición puede tener un entorno continuo y a la vez cambiante. Así, el espacio interior y el exterior se mezclan y le dan un toque a la siguiente habitación temática, aportando a los visitantes una experiencia de descubrimiento. Esta disposición espacial también le da al pequeño interior la posibilidad de una mirada espacial más amplia. Las paredes desplazadas parecen estar flotando, y le dan al espacio una sensación de «ligereza», alineándose con el estilo de Ponti. Las paredes se han vaciado, lo que permite ver a través de otro espacio, por lo que las divisiones espaciales son aún más ambiguas.

Hemos diseñado el espacio para introducir el arte del polifacético diseñador Gio Ponti de forma fragmentada, mientras los visitantes descubren la conexión con su arte.

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