9.5.2011
Edificio de viviendas en Madrid
El proyecto se sitúa en el distrito de Moncloa en el centro de Madrid. El suelo responde al derribo de un garaje interior y un edificio ocupado por una antigua churrería, y en esa liberación de espacio se descubre un patio de manzana que debido a su acceso diagonal configura un cruce de calle con cinco esquinas, caso singular en el conjunto del barrio.
La promoción corresponde a la iniciativa privada aunque, debido a su singularidad, el proyecto es estrechamente vigilado por las distintas autoridades públicas.
La edificación vecina con más lustre es la Casa de las Flores, siendo el resto de la compañía construcciones de mediana factura.
El proyecto responde y se construye desde esa situación enrocada e intenta resolver su configuración desde una cierta adaptación a las condiciones del entorno, no tanto desde la sumisión sino desde la proposición crítica. El edificio que resulta es fracturado y de caligrafía diversa en su contacto con los distintos lienzos urbanos y adquiere una presencia neta y singular en el remate de esquina. En dicho punto, la edificación se retrasa ampliando el espacio público y ocultándose a las vistas desde las calles cercanas haciéndose presente de forma notoria tan sólo desde la calle de la Princesa a una distancia media.
La edificación intenta responder a la ciudad, construir en la medida de lo posible un lugar mejor desde lo ya consolidado, pero también un lugar en el que la edificación se acaba haciendo presente de manera activa.