21.2.2019
Complejo Judicial Ciudad de Bariloche – Distinguido BIA-AR 2018
El proyecto se implanta sobre un sobre un vació urbano existente ubicado al este de la Ciudad de Bariloche, en direccion al aeropuerto, sobre la avenida Esandi, de gran flujo vehicular y con largas vistas al lago Nahuel Huapi. Este proyecto fue distinguido en la categoría “Políticas de oficio, tradición e innovación”, de la sección “Prácticas Públicas”.
Ícono
Se define la partición programática en 2 volúmenes prismáticos de aspecto similar que concentren todas las actividades de un programa judicial complejo y logren resolver con funcionalidad y flexibilidad todo lo que ello implica.
Contexto
El proyecto se implanta sobre un sobre un vació urbano existente ubicado al este de la Ciudad de Bariloche, en direccion al aeropuerto, sobre la avenida Esandi, de gran flujo vehicular y con largas vistas al lago Nahuel Huapi.
La huella del edificio libera una porción del terreno, con orientación norte, que se destina a un parque lineal de carácter publico que conforma un área de reunión y lo vincula, así, con la comunidad. Este espacio favorece el desarrollo de acontecimientos culturales, plurales y abiertos a la ciudad que generen intercambio e interacción con este nuevo ámbito. Se busca, ademas, que esta pieza actúe como nexo con el edifcio municipal previsto para el predio vecino.
Materia
Se articula el proyecto en base a la posibilidad de economizar los recursos para su construcción y su posterior ciclo de vida. Es Primordial que el edificio sea flexible a nivel estructural para poder contar con un módulo adaptable a distintos programas y capaz de admitir diferentes requerimientos de uso a lo largo del tiempo. El módulo estructural propone una grilla que sustenta la idea de eficiencia en obra y de economía de recursos.
El conjunto, busca resolver una imagen de impronta institucional y carácter neto y austero, que responda de forma adecuada a las funciones que en el interior se ejecuten y sea considerada con la utilización de recursos disponibles. Se contempla en cada fachada la incidencia solar y la orientación para responder de manera precisa y sustentable.
Sistema
Se optó por una tipología edilicia compacta, que responda adecuadamente a la distribución de los requerimientos institucionales de este tipo. Un subsuelo y planta baja comunes, son perforados por la presencia de los patios propios de cada volumen. En el primero se encuentran los estacionamientos en contacto directo con la vía de mayor flujo vehicular y de modo de no intervenir con fachada urbana. En la planta baja, la recova funciona como eje de ensamble entre ambos edificios. Cada uno cuenta a su vez con 3 plantas de oficinas organizadas en torno al vació central. Como remate, un sobretecho en la última planta permite no solo una amplia mejora en el tratamiento de los recursos energéticos en una zona con comportamientos climáticos extremos.
Vínculos
Al norte y con visuales al lago se ubican las circulaciones públicas, las mesas de entrada y las áreas de espera.
En su desarrollo el parque lineal actúa como un corredor urbano que resuelve los accesos peatonales al conjunto y se relaciona en forma directa con el parque propuesto, mientras que una recova permeable, en alusión a las tradicionales recovas barilochenses, invita al ingreso a cada uno de los edificios y articula dicha relación. El parque promueve la biodiversidad y el proyecto de paisaje contemplará el uso de especies nativas para evitar el riego excesivo. Este parque genera además, un lazo sólido con la comunidad.
Investigación
Cada volumen encierra un patio central que actúa como eje vertical articulador del espacio, brindando a su vez, permeabilidad, continuidad de visuales e iluminación natural a las áreas de trabajo.
Mediante la definición material de los cerramientos que definen los patios, tanto la cubierta como las fachadas interiores, los mismos actúan como invernaderos. Esta condición supone un aporte sustancial al rendimiento energético del edificio y por lo tanto a la sostenibilidad en el funcionamiento del mismo a lo largo del tiempo.
La cubierta vidriada y su estructura de vigas-parasol reúne las condiciones necesarias para controlar la radiación solar en períodos estivales, permitiendo que las fachadas interiores (de mayor superficie) carezcan de complejidad tecnológica y por lo sean más económicas.
Podés encontrar este proyecto en el Catálogo de la BIA-AR 2018. Obtenelo acá > http://biaar.com/catalogos/