Casa de playa Aldo, en Hood Canal, WA

Dos alas móviles se ciernen sobre la ladera y la playa sostenidas por delgadas columnas de acero y pilas de alfileres. Ubicada en la costa este de Hood Canal cerca de la base de submarinos de Bangor, la nueva casa de playa incluye la estructura original de dos dormitorios para un programa ampliado de dos nuevos dormitorios, dos baños y espacio flexible. El diseño consta de tres partes distintas: la huella original y las dos alas salientes: la primera es una adición en la planta baja al sur y la segunda, una suite principal en el nivel superior hacia el norte.

Resolviendo el problema regional de construir en una costa frágil

La casa representa un problema regional del noroeste de construir en una costa frágil. “Debido a las complejas limitaciones de la exención de la costa, nos mantuvimos en el espacio existente, expandiendo la casa solo desde la estructura existente”, dice Matt Wittman, director de Wittman Estes. “Como resultado, todos los pies cuadrados nuevos están respaldados por cimientos de pilares compactos sobre pilotes de pines”.

Se incorporaron plantaciones nativas y especies tolerantes a la sequía para mitigar la perturbación del sitio y aumentar la función ecológica del sitio. Los arquitectos querían que la preservación del sitio se extendiera más allá de la huella y en los materiales del edificio en sí. El cedro local, esencial para una casa del noroeste, se desgasta naturalmente con las estaciones húmeda y seca. El acero inoxidable y el hormigón aportan un acento marítimo a los materiales de madera. Mediante el uso de materiales de intemperismo natural, se prolongó la vida útil del edificio al tiempo que se facilitaba el mantenimiento a los usuarios.

Un lugar para familiares, vecinos y amigos

Los clientes, abuelos jubilados, querían un lugar de retiro y bienvenida. “Como muchas familias del noroeste, eso significó diseñar varios espacios interiores y exteriores para sus hijos, futuros nietos, vecinos y amigos”, dice Wittman. Las nuevas alas de la casa crean una capa de comunidad y privacidad a través de habitaciones de invitados para amigos, una sala de literas y área de juegos para niños, y una cocina al aire libre y terraza para comidas en común con los vecinos. Dos adiciones se extienden fuera de la estructura original para satisfacer esta necesidad: dar forma a los espacios compartidos junto con las habitaciones para la reflexión y la privacidad. Dos terrazas alargan a la perfección el uso de los espacios adyacentes para fomentar las conversaciones nocturnas junto a una cocina al aire libre.

La estructura original interactúa en todas partes. El suelo de pino recuperado atrae el bosque olímpico hacia el interior. Las chimeneas de ladrillo existentes se funden en esta paleta, evocando la intemporalidad y la fuerza, representando la transformación única de la casa. La reutilización adaptativa de Aldo Beach House buscó una integración cuidadosa de lo familiar con lo moderno, uniendo lo antiguo y lo nuevo en la costa de Hood Canal.

Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/aldo-beach-house.html