17.11.2015

Un emblema arquitectónico de nuestra cultura postulado para formar parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO

Tenemos el desafío de construir ciudadanía y la cultura es la conciencia de un pueblo, la configura, la promueve y la conforma. Su patrimonio material e inmaterial, su historia, sus rasgos más distintivos y el reconocimiento a los más destacados artistas y personalidades, se tornan vitales para nuestra identidad como comunidad.

La Casa Curutchet está ubicada en el eje fundacional de la ciudad de La Plata, sobre la Avenida 53 entre la avenida 1 y la calle 2. Está actualmente postulada a integrar la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, en el marco de la obra y legado del Arquitecto suizo francés Charles Eduard Jeanneret (Le Corbusier), quien revolucionó la arquitectura y el urbanismo del siglo XX con sus ideas y proyectos.

La Organización de las Naciones Unidas, a través de la UNESCO, tiene la misión de identificar, proteger y preservar aquellos bienes considerados de valor excepcional para la Humanidad. Así, para que la Casa Curutchet sea aceptada e integre la Lista de Patrimonio Munidal debe responder adecuadamente a los criterios establecidos por el Comité de Patrimonio Mundial.

La UNESCO, mediante la Convención de Patrimonio Mundial de 1972, tiene la responsabilidad de garantizar la conservación y disfrute de estos sitios inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial. Estos sitios pertenecen a todos para compartirlos, cuidarlos y respetarlos. Su desaparición sería una pérdida irreparable para la humanidad. Los Sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial cumplen una función de hitos en el planeta.

Un bien declarado Patrimonio Mundial, constituye un orgullo para toda la comunidad que lo alberga en su territorio, y a su vez conlleva la responsabilidad de protegerlo y conservarlo. Su inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial implica un compromiso de su protección y preservación de la sociedad en su conjunto hacia el sitio, y su valor refuerza la autoestima de un pueblo y promueve e incrementa el desarrollo económico integral a través de la actividad turística.

La Casa Curutchet es testimonio cierto y consolidado de la influencia de la obra arquitectónica de Le Corbusier a nivel mundial y refleja la internacionalización del movimiento moderno después de la Segunda Guerra Mundial.

Por todo ello, y a partir de una política pública cultural activa, directa e inclusiva, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires está desarrollando, a través del Instituto Cultural, acciones de gestión cultural integral comprometidas en pos de su preservación e inscripción del inmueble patrimonial para formar parte de la Lista de Patrimonio Mundial.

Testimonio de ello es la conformación del Comité de Sitio Casa Dr. Curutchet, con el acompañamiento del Ministerio de Gobierno provincial y la  participación de un Cuerpo Colegiado constituido por los organismos nacionales, provinciales y municipales, así como organismos internacionales de competencia temática específica.

La Casa Curutchet forma parte de una serie de obras. Este constituye un nuevo concepto relacionado con el patrimonio, que se basa sobre la existencia de un conjunto de elementos con características comunes entrecruzadas de algún modo con el fin de establecer un nexo de continuidad entre todos ellos. La serie aporta a una comprensión más sutil, y a un enfoque renovado en la conservación del patrimonio, superando la idea de lo ‘único’ e irrepetible, para atender a los sistemas y extendiéndose en el territorio hasta alcanzar escala regional e interregional.

En este caso la serie está formada por bienes que llevan por sí Valor Universal Excepcional, como la Ville Savoye en Poisy, la Unidad Habitacional de Marsella, y la Capilla de Ronchamp. Cada componente individual que constituye la serie, contribuye de manera sustancial a esos valores universales, al entender la influencia que han ejercido en otros países y regiones. Los países comprendidos en la postulación junto al nuestro son Francia, Suiza, Belgica, Alemania, India y  Japón.

Una casa con historia
En 1948, Le Corbusier recibió de parte del cirujano argentino Pedro Domingo Curutchet y por vía epistolar, el encargo de proyectar una casa en la ciudad La Plata, Argentina.

El proyecto realizado en París entre 1948 y 1949, propone una planta libre, con solo una cochera y dependencia de servicio en la planta baja. La casa se compone de dos cuerpos correspondientes a las áreas de atención médica (consultorio) y habitacional. El consultorio ocupa el frente del terreno en el primer piso. El sector privado habitacional ocupa la parte posterior del terreno, elevado con respecto al nivel del área de trabajo, cuyo techo corresponde a la terraza del nivel del living y comedor. Los dormitorios se encuentran en el tercer nivel. Esta distribución ha logrado una óptima orientación con vistas a la calle y los espacios verdes cercanos.

Una rampa articula las áreas desde el ingreso, al mismo tiempo que permite una percepción secuencial y diversa del espacio. Este elemento evidencia la continuidad del espacio, tanto en el interior como en el exterior, dirigida a demostrar la materialización del tiempo y espacio, siempre presente en la obra de Le Corbusier.

Cuando el gran maestro aceptó el encargo sugirió que la obra fuera dirigida por el Arquitecto Argentino Amancio Williams, uno de los más importantes exponentes del movimiento moderno en nuestro país.

En esta obra Le Corbusier utiliza sus principios arquitectónicos más creativos: pilares de hormigón armado, terraza-jardín, planta libre, fachada libre y ventana longitudinal. Constituye el único proyecto de vivienda elaborado por Le Corbusier que tuvo la posibilidad de concretarse en América del Sur. Se trata de un bien privado que ha sido reconocido con la máxima protección legal desde el Municipio de la ciudad de La Plata, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires y la Nación.

Su propuesta ha tenido en cuenta la relación con el entorno, en particular con las dos construcciones contiguas ambas de dos plantas, una de fines del siglo XIX y la otra de 1937, una de las primeras obras de arquitectura moderna de la ciudad de La Plata. Le Corbusier logra una integración de la Casa con estos dos edificios de altura y características diferentes. Estas tres residencias conforman en conjunto un Patrimonio Nacional protegido. H

Por: Lic. Andrea Balleto, Subsecretaria de Cultura de la Pcia. de Bs. As.
Crédito Fotográfico: Instituto Cultural de la Pcia de Bs. As.

Fuente > Revista Habitat

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