Robusta, cafetera artesanal

Para los amantes del café este método se ha convertido en un ritual y ha marcado a través de los años un antes y un después en la forma de preparar la infusión y es por eso que ha trascendido hasta hoy por su sencillez y sabor.

El producto está pensado para personas que gustan de disfrutar de una taza de café y hacen de este momento un ritual. Robusta tiene la forma de un cilindro vertical y se divide en tres partes: tapa superior, porta filtro y taza. A través de la sencillez formal y el orden de sus componentes el objeto comunica de forma evidente el modo de uso.

La tapa superior sirve de cierre durante el filtrado y una vez finalizado el proceso cubre el café hasta el momento de beberlo. El porta filtro es la parte central de la cafetera, en él se vierte el agua caliente. El cono de filtrado está retraído de los bordes del cilindro exterior lo que permite un agarre seguro del mismo sin tener contacto con la superficie caliente. La taza recoge finalmente el café filtrado, esta tiene la particularidad de prescindir del asa clásica y en su lugar genera un aro perimetral que la envuelve.

El producto combina dos materiales nobles como la cerámica y la madera. El resultado es de una estética despojada que la transforma en un objeto contemporáneo. La fabricación es mediante proceso de colado de barbotina en moldes. Una vez desmoldado se realizan dos horneadas: la primera para coser la pasta y la segunda para el esmaltado final de la pieza. La cerámica se cose a más de 1040 grados convirtiéndolo en un material atóxico e impermeable. Los productos utilizados para el esmaltado de la pieza son de origen alcalino por lo que el producto está libre de plomo y cadmio.