29.6.2015
Un pabellón en un jardín
Una caja de cristal en un territorio con un fuerte carácter, repleto de puntos notable y a su vez con un orden general. Frente a esto, tomamos la letra base del problema: una caja de cristal, equipamiento del jardín y anexo del museo.
Construimos una sombra y una protección, un lugar más a la sumatoria de espacios de calidad que ya posee el conjunto.
Para ello se monta una estructura metálica, simple y blanca, donde se aloja en su interior la caja de cristal, la cual se posiciona atendiendo a ciertos datos del lugar. Se recuesta sobre el muro sur de ladrillo, para dar lugar a una galería norte, lugar de acceso y expansión del café en climas favorables y que acondiciona el interior.
Se busca la sobriedad como forma de permanencia a lo largo del tiempo y las sensibilidades.
La arquitectura no toma más atribuciones que las de resolver una necesidad para la cual fue convocada y se integra al paisaje de manera silenciosa, tratando de perderse entre los reflejos y las sombras del patio de esculturas.