El espesor del suelo
Para preservar la tipología interior del edificio, su espacialidad neoclásica, se decide que todas las áreas nuevas, de mayor demanda espacial: el centro de convenciones / auditorio, junto con todas sus dependencias de servicio, se localicen ocupando el extenso basamento existente, lo que permite recuperar el edificio original, adaptándolo para usos flexibles como exposiciones, eventos, ferias, etc. Sin alterar su tipología de manera drástica.

A su vez la plataforma de basamento se transforma en el exterior, en un nuevo espacio público para la ciudad, un mirador amplio al cual se accede por una rampa de escala urbana que se desprende de una plazoleta que articula la esquina entre el nuevo boulevard proyectado por el municipio y la calle Vélez Sarsfield.

Un antiguo atrio, una escalinata, un foyer
La nueva planta del edificio como su nueva sección, expresan el vínculo fluido entre el atrio del antiguo casino con el nuevo foyer del centro de convenciones / sala de espectáculos, a partir de una escalinata amplia, la cual también se propone como un lugar de estar, gradas y actividades relacionadas a las propuestas para los dos edificios, el antiguo y el nuevo. La articulación entre el atrio, la escalinata y el foyer, trazan en la tipología una dirección de continuidad transversal, que recupera la relación con el Sierras Hotel, conformando un sistema de lugares interiores que se expande hacia el espacio exterior.

Se propone como remate de este eje transversal, presidiendo el espacio público, una fuente que remite a la fuente localizada en el ingreso del Sierras Hotel, articulando referencias arquitectónicas en clave contemporánea, a la lógica neoclásica de composición del conjunto.