15.1.2013
OostCampus, Ayuntamiento y Centro Cívico, en Oostkamp
El punto de partida del proyecto es un radical reciclaje in situ del edificio industrial existente, incluyendo sus cimientos y soleras de capacidad industrial, estructura portante, la piel exterior con su aislamiento e impermeabilización, servicios, instalaciones y equipos, la estación transformadora de electricidad, calderas, conductos de agua, instalación contra incendios, saneamiento, drenaje e incluso aparcamiento, vallado y accesos.
Reciclaje de lo invisible
Esta operación puede definirse como upcycling: en lugar de reintroducir materiales en un ciclo productivo, los utiliza tal cual están, pero elevándolos de ciclo al añadir valores nuevos. La ciudad de Oostkamp adquirió en 2006 unas instalaciones de Coca-Cola, en una parcela de 40.000 m2 con una nave industrial de 11.000 m2 construida en 1991. Las bases del concurso planteado en 2008 pedían un Campus que pudiese reunir en esta parcela central y bien comunicada la mayoría de los servicios públicos de la ciudad. Decidimos reutilizar la amplia nave industrial. No sólo reciclar materiales como el acero, sino utilizar el espacio en sí, junto con todos los “invisibles” sistemas técnicos que lo hacen habitable. OostCampus se inauguró el 15 de junio de 2012.
– Energía Gris: El respeto por la “energía gris” (la energía utilizada para la producción de algo) acumulada en la construcción existente es un criterio importante para el desarrollo sostenible. Sustituir una construcción existente por un edificio nuevo (lo cual afectaría incluso el alcantarillado o las aceras) implicaría la adquisición de una importante deuda de carbono que ni el edificio más eficiente puede ahorrar y devolver en el transcurso de su vida útil.
– Sostenibilidad y Economía: La reutilización del edificio existente nos permitió cubrir todo el programa pedido con el limitado presupuesto disponible. Nuestra propuesta es más barata de implementar y más barata de mantener que las alternativas habituales. El precio por metro cuadrado resultante es un tercio del normal para este tipo de programas.
Paisaje luminoso de nubes blancas
Reutilizamos el edificio, al tiempo que proponemos una radical transformación del interior, para convertirlo en un paisaje luminoso de nubes blancas, un espacio público protegido dentro de un ambiente de clima controlado, dentro del cual se pueden organizar los elementos de programa en simples agrupaciones modulares adaptables. Las burbujas blancas, delgadas y ligeras, son cáscaras autoportantes de GRG (yeso con refuerzo de fibra de vidrio), de 7-8 milímetros de grosor, con un peso de tan sólo 7 kg/m2.
Las aberturas entre las nubes están equipadas con dispositivos simples que transforman todo tipo de condiciones meteorológicas en eventos maravillosos. Los fuertes vientos del exterior se transforman en electricidad que alimenta un disco de LEDs, un sol artificial que traerá alegría a bodas y celebraciones.
– Reciclaje divertido: Al abordar la cuestión de la energía acumulada, se propone además una forma divertida de hacer las cosas. Esta actitud ha sido definida por los críticos como Exuberancia Sostenible, y elogiada como una clave para el éxito de los criterios sostenibles.
– Tecnología sencilla con resultados espectaculares: Las conchas GRG, simples y ligeras, convierten una enorme y fea fábrica en una experiencia maravillosa, con un mínimo coste energético y económico.
– Interfaz climático: En un país con un clima inestable, creamos un interfaz que reacciona a las condiciones externas. El sol artificial de energía eólica, los conductos anidolicos de luz natural, y la plaza protegida, interactúan con la cebolla y la inercia térmica de la losa de hormigón industrial, en un simple sistema autogestionado que requiere mínimo aporte energético para calefacción, y por supuesto ninguna refrigeración.
Un espacio público
El gran espacio creado dentro del paisaje de nubes blancas se convierte en una especie de Grand Place, con un clima permanentemente templado.
– Transparencia: En este espacio-burbuja, esta espuma de transparencia y democracia, los servicios de la ciudad se agrupan en una estructura de dendritas, como cristalización de una nueva relación entre ciudadanos y administración. Los servicios de la ciudad se organizan de acuerdo a un topograma, una representación gráfica de las relaciones entre personas, servicios y espacios, desarrollado mediante de talleres con los empleados de la ciudad y los ciudadanos.
– Participación. Los 170 trabajadores de la ciudad participaron en talleres para discutir el proyecto, a todos los niveles, desde el concepto general hasta el mantenimiento de los materiales y acabados. Los vecinos fueron consultados en distintas ocasiones, y especialmente en relación al proyecto de Parque Productivo que circunda la edificación.
– Flexibilidad: Los módulos, apoyados sencillamente sobre la losa existente, pueden reorganizarse o ampliarse, permitiendo el desarrollo futuro con un mínimo de recursos. El nervio central de las dendritas separa el espacio publico del Back-Office, lanzando ramales en uno y otro sentido, entrelazando ambas funciones, y con salas de reuniones informales en las articulaciones. El sistema de dendritas sirve también para distribuir las instalaciones, sin apenas tocar la solera de hormigón existente.
– Legibilidad: Los puntos de información situados en los extremos de las dendritas son una versión 3-D de la página web de la ciudad. Reproducen la gráfica, y tienen una interfaz de pantalla táctil, pero, lo más importante: uno de los frames es una puerta por la que se puede entrar y hablar con la persona que está detrás del sitio web.
– Administración transparente: Los ciudadanos pueden ver lo que está pasando en su ayuntamiento. El salón de plenos está a la vista de todos. Las reuniones ocurren en mitad del espacio público. La información es accesible. Incluso el departamento de obras públicas y su patio de operaciones y almacenaje de materiales se convierte en un paisaje, mostrando a los paseantes por el Parque Productivo la coreografía de su trabajo cotidiano.
Accesibilidad, pero integrada. La señalización está en el suelo con líneas en relieve marcando los caminos, pero para todos, no sólo para los discapacitados visuales. Los puntos de información tienen mesas con vuelo, aptas para cualquier visitante sin que estorben al movimiento de una silla de ruedas, pero de forma natural, sin que parezcan diseñadas especialmente para discapacitados.
Diagramas y conectividad
Tenemos que acomodar una mezcla muy variada de elementos de programa dentro del mismo espacio. Puede haber alguien casándose en un extremo mientras en otro lugar alguien carga materiales de construcción para obras públicas. Nuestros simples diagramas ayudan a controlar los flujos de personas y materiales, el ruido y el polvo, compatibilizando el trabajo diario y la celebración.
– Cebolla térmica: La pérdida de energía a través de una membrana crece de manera exponencial con la diferencia de temperatura. Es mucho más eficiente tener varios niveles de control de clima, con pequeños saltos térmicos cada uno, que intentar calentar o enfriar el edificio forma homogénea hasta la puerta. Además, el volumen realmente calefactado será mucho menor respecto del total.
También es más cómodo, al entrar en un edificio, encontrar que la temperatura en el vestíbulo es sólo un poco diferente a la exterior, de manera que no tengamos que quitarnos abrigo de inmediato; y alcanzar la temperatura de confort gradualmente, al ir entrando en las zonas interiores. Esto es particularmente cierto para un edificio público, donde las capas térmicas pueden corresponder a controles de acceso. La cebolla térmica es un dispositivo importante para minimizar el consumo de energía durante la vida del edificio. Además, nos apoyamos en la inercia térmica de la losa de hormigón, junto con un sencillo sistema de ventilación nocturna, para no necesitar refrigeración.
El control luz de natural, y su mejora para las áreas de trabajo y espacios públicos, se garantiza a través de una serie de mecanismos como la chimenea solar, los anillos de LEDs de refuerzo, así como el sistema de conductos anidolicos. Unas cortinas plateadas conducen la luz desde los lucernarios de cubierta hasta los espacios más interiores, aportando luz natural hasta en los últimos rincones.
Paisaje productivo
El Parque Productivo ocupa los terrenos circundantes. Está construido con materiales reciclados. Las actividades del Parque, los caminos peatonales y los carriles para bicicletas, conviven en armonía con los espacios de almacenamiento y la gestión de material de construcción de los departamentos de Obras Públicas y de Jardinería. La necesidad de construir un depósito estanco para la sal anti-nieve, junto con la obligación de gestionar un excedente de tierras de excavación procedente de distintos puntos del municipio, nos lleva a proponer una colina-graderío. Un punto elevado desde el que contemplar el horizonte en este plano país.
Los materiales que se pueden almacenar al aire libre se contienen con unas piezas tipo Lego gigante, que se anclan en el peso muerto de un camino elevado que recorre el perímetro de la zona de trabajo. Los caminantes y ciclistas, elevados 1,5 m sobre el suelo, pueden ver todo lo que ocurre en este espacio productivo. Cosechando agua. La cubierta del edificio proporciona agua limpia para todos los aseos, los talleres, y los puntos de limpieza de vehículos. Esto se suma a la del agua recogida en el parque, que puede contener un poco de arena a filtrar, pero es perfecto para llenar los tanques de los camiones de limpieza viaria.
Al pie de la colina artificial, un surco de drenaje asegura la evacuación de las frecuentes lluvias – pero colocando unos troncos atravesados casualmente sobre el irregular cauce, el dren se convierte en un wadi, un lugar de aventura para la chiquillería. Los nuevos árboles se alinean como pantallas contra el viento, siguiendo un esquema tradicional en la zona. Los prados así generados serán agradables áreas de picnic – pero serán prados productivos, pues al recortarlos darán forraje para las vacas de un agricultor colindante.
El parque también se construye con un presupuesto muy controlado, y sus elementos característicos son sistemas productivos activos, que añaden valor en lugar de generar un gasto. Es parte de un proyecto europeo Interreg MP4: Making Places Profitable – Hacer Lugares Rentables.
Materiales
Elegimos materiales básicos, ya sean procedentes de reciclado o materiales ligeros y sencillos, o simples materias primas con apenas una simple mecanización. Pero siempre con una vuelta de tuerca, la aplicación de nuestro principio «reciclaje divertido». Burbujas GRG. Con sólo 7 mm de espesor, transforman dramáticamente el espacio.
– Flocado de Papel. Las burbujas se aíslan térmicamente por su cara exterior. Por el interior, los puntos con intensa concentración centrípeta de sonido son tratados con el flocado celulósico de papel reciclado, para absorber el exceso de ruido y reducir los efectos parásitos producidos por las superficies esféricas. Algunos efectos de sonido se conservan, marcados en el suelo, para diversión de los visitantes.
– Paneles CNC. Cada cluster es reconocible por la textura de su revestimiento. La textura es un fresado CNC de un tablero básico (aglomerado, MDF), convirtiendo una materia prima barata y simple en un acabado elegante.
– Fieltro de PET. Un fieltro hecho con reciclado de botellas de PET se utiliza para recubrir muebles, paredes, y particiones, añadiendo calidez al diseño, y contribuyendo a suavizar el paisaje sonoro.
– Pintura. El exterior del edificio industrial, con sus redondos ojos de buey, sólo necesita una capa de pintura.
– Piso. El suelo es la superficie de hormigón existente, ligeramente abrillantado. Las marcas y líneas que se utilizaban para la colocación de palets permanecen en su lugar, añadiendo profundidad y vida a la amplia superficie.
El exterior, es un no-edificio. Cubrimos el revestimiento rojo de las antiguas oficinas de coca-cola con una pantalla de vegetación impresa, para optimizar la exposición solar, pero también significando el cambio hacia una actitud amable y cuidadosa del medio ambiente, basada en el estudio de los costes energéticos y ambientales de nuestras construcciones y su mantenimiento, en lugar de un simple fetichismo vegetal.