14.12.2016
Maison BBàN
El proyecto propone conservar el volumen de la construcción principal para preservar los trazos arquitectónicos históricos que desaparecen paulatinamente del barrio.
La demolición del volumen de la cocina permite extender la vivienda hacia la parcela vecina desarrollando una nueva implantación en forma de “U”. De esta manera, la construcción se enrosca entorno a una terraza elevada respecto a la calle, que articula la relación entre la vivienda existente y la extensión.
Contexto
El proyecto se sitúa en un barrio con muy baja densidad urbana. La parcela está situada en la confluencia de dos calles: la arteria principal del barrio, formada por pequeños edificios de viviendas de entre tres y cuatro plantas, y una calle de apenas un centenar de metros, ocupada exclusivamente por viviendas medianeras de dos niveles. Casi todas las construcciones están totalmente alineadas a la calle.
Materia
“Con la utilización del metal, vidrio y madera en las fachadas interiores, se consigue la suavidad del vientre de un erizo”. Extracto de la valoración del jurado de los Premios Fad Internacionales 2016.
Sistema
Toda la reestructuración se organiza alrededor de la terraza exterior. Este vacío traza las relaciones entre lo existente y lo nuevo a la vez que articula la relación entre los diferentes niveles de la vivienda. La nueva entrada se produce ahora bajo la terraza, retirada respecto a la calle, y a través de un porche abierto y generoso que disuelve los límites entre la propiedad privada y el espacio público.
Vínculos
“La casa Chestnut Hill no era una escultura. En algún lugar dentro de ella, no ya la vieja señora que muriera hace años sino otro, habitaba el ruido que hace un tenedor al caer al suelo”. Juan Muñoz.
Investigación
Una ciudad que se desdibuja a una velocidad vertiginosa, una tipología tradicional de organización complicada y un programa que no cabe en la parcela. Y la voluntad de modelar lo immaterial a través de las formas y de la materia. La luz y el vacío, las vistas cruzadas y diagonales importan más que la construcción en sí misma. Construimos para hacer arquitectura. Y no al revés.