24.1.2017
La casa MVRDV
La renovación las nuevas oficinas de MVRDV de 2.400 m2 de superficie, con 150 espacios de trabajo, tenía en su núcleo la idea de capturar y mejorar su ADN. El nuevo proyecto se construye sobre las oficinas anteriores, transformado los espacios, haciéndolos más flexibles y productivos.
«La expansión de la familia MVRDV necesitaba una nueva casa; esto es exactamente lo que trató de capturar. Todo lo que el hogar requiere, una sala de estar, un comedor, un sofá para que todos los habitantes puedan compartir», explica Jacob van Rijs, co-fundador de MVRDV. «Esta fue también la oportunidad de capturar nuestra forma de trabajar y funcionar como una oficina, a medida que los nuevos espacios impulsan nuestros métodos de trabajo; surgen espacios eficientes que mejoran las formas de colaboración del trabajo«.
La habitación familiar más grande se convierte en la pieza central de la interacción social con tres elementos de gran tamaño de una casa: el sofá, la mesa y una lámpara con vegetación – una gran tribuna con una pantalla de proyección desplegable para conferencias, presentaciones de trabajo o de fútbol. El atelier de los equipos de proyecto retoma la masa principal del espacio central y es ligero y silencioso. Una pared de cristal, cubierta de garabatos y diagramas de trabajo, separa el atelier de la sala de estar que se extiende al otro lado del centro.
Frente a este lugar, se encuentran las salas de reunión de colores. Cada una tiene su propio tema y mobiliario específico para las diferentes formas de reunión; la sala de estar con paredes de pizarra imantada para los talleres, el área de presentación en azul oscuro para reuniones de mayor tamaño, el salón con sillas bajas para conversaciones en privado, la sala de color marrón e íntima Biblioteca y la sala de juegos o reuniones informales en la mesa de ping pong. Y, por supuesto, otros espacios monocromáticos.
Los cinco tramos en forma de arco de las oficinas se han mejorado, las áreas previamente cerradas ahora son abiertas y reemplazadas por paredes acristaladas. Desde casi todos los puntos de la oficina se pueden ver a otras personas.
La actitud hacia el trabajo creativo se refleja, además, en algunas características específicas: a diferencia del resto de la oficina que disfruta de habitaciones llenas de luz y vistas a través de la oficina, los directores deciden tener su espacio escondido en una esquina más oscura, en la planta baja cerca la esquina de la impresora y el café, para animarles a estar fuera del resto del equipo de MVRDV. Una pared con fotos de la familia y una mesa de almuerzo de unos 30 metros de largo común, son muestras del tejido social de la empresa.
El edificio fue diseñado originalmente por el arquitecto de la posguerra holandés Hugh Maaskant en 1952 que también diseñó otros edificios emblemáticos de la ciudad como el Groot Handelsgebouw y el hotel Hilton en el centro de Rotterdam.
Visitá el texto original en inglés > http://bit.ly/2j9QOqc