41. paisajismo: «lo nuestro»

Valorizar lo nuestro,
nuestra esencia,
nuestro espíritu,
nuestra identidad,
aquello que somos y tenemos y que no siempre valoramos.

Cristina Le Mehauté, de la mano de Easy, líder en venta de productos para la construcción, remodelación, diseño, decoración y equipamiento de la casa y el jardín, propone un espacio con contenido de vanguardia que revaloriza «lo nuestro» a través de la exposición de sus productos y elementos constructivos utilizados de manera original y diferente. Este espacio ha recibido la medalla de plata al paisajismo de los Premios Casa FOA 2006.

El concepto del espacio es revalorizar la arquitectura de los paisajes de nuestro país y buscar en ellos el espíritu de la propia identidad. En «Lo Nuestro», los objetos se mezclan, el piso se continúa en las paredes y los muros se despegan para transmitir un mensaje. El color verde une estos elementos, los adapta y los trasforma para formar el escenario.

El espacio está comprendido entre dos fachadas: Una tradicional, con el cuidado con que antes se construían las fachadas clásicas, en este caso, la de una fábrica. La otra es una simulación de La Boca, parte de nuestra identidad que se manifiesta en ese barrio tan particular de la ciudad.

Por otra parte, el espacio está atravesado por una gran rampa para autos que remite a nuestra arquitectura de hoy, de carácter ascendente: representa una construcción que va a toda velocidad pero que no debería pasar por encima de nuestra arquitectura noble, aquella que los emprendimientos inmobiliarios modernos suelen devorar. Dicha arquitectura es simbolizada en este caso por ladrillos, baldes de construcción y cucharas de mezcla que caen como cascadas desde las alturas.

Por último, un pequeño sector verde en la parte inferior de dicha rampa materializa un espacio nuestro, un trozo de paisajismo argentino representado por la huella digital, que simboliza la identidad. Tomando de base las papilas dactilares de la huella, se diseñó un espacio en color verde de plantas populares. Con maderas e imaginación se armó una mesa, bancos para chicos y grandes, y canteros regados por una lluvia de vidrios. Todo está entremezclado con césped de verdad y césped sintético que representan nuestra realidad de hoy, la de verdad y la del plástico.

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