El Museo Nacional de Bellas Artes vuelve a sus raíces

(Foto: Ministerio de Cultura)

La fachada del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) está siendo acondicionada para devolverle su color original definido por el arquitecto Alejandro Bustillo. El trabajo es coordinado por el Ministerio de Cultura de la Nación y cuenta con el apoyo del INTI, a través de su Programa Puesta en Valor del Patrimonio Cultural (RESTAURAR).

Para devolver el aspecto estético que presentaba el museo en aquel momento, especialistas de la cartera de Cultura realizaron cateos y tomaron muestras en distintos sectores de la fachada. A partir de estos estudios y de una investigación histórica, pudieron identificar distintos estratos —resultado de las sucesivas intervenciones que se realizaron a través de los años— y hallaron muestras del primer color utilizado.

El color, un punto en el espacio
Las muestras originales relevadas fueron analizadas en laboratorios del INTI con un fotocolorímetro, instrumento que permite determinar el color de una superficie a partir de sus coordenadas cromáticas. “El sistema de color utilizado fue el CIELab, que consiste en dos ejes perpendiculares entre sí y coplanares que definen el color y un tercer eje normal a este plano que indica la luminosidad”, detalló Mónica Pinto, jefa de la Unidad Técnica de Recubrimientos Orgánicos del Centro INTI-Procesos Superficiales.

Las tres coordenadas cromáticas permitieron definir un punto en el espacio y traducirlo a una referencia determinada dentro de una carta de colores (conocida comúnmente como pantone). La empresa argentina Tersuave donó la pintura para llevar adelante este trabajo, siguiendo las pautas cromáticas establecidas.

Para la selección de la pintura, los especialistas del INTI recomendaron utilizar un recubrimiento tipo látex exterior a base de resinas tipo acrílico-estireno evaluando su adecuación a la norma IRAM 1077:2008 de pinturas tipo látex para exteriores. Además, destacaron la necesidad “que los recubrimientos que forman parte del esquema a aplicar pertenezcan a un mismo fabricante para evitar las incompatibilidades que puedan producirse al emplear diferentes marcas”. Por último, propusieron dar dos manos de pintura; y utilizar el método de aplicación tipo airless para la mayor parte de la superficie y pincel para las zonas de difícil acceso, como ornatos, cornisas y relieves.

Puesta en valor
La asistencia técnica brindada por el INTI incluyó además recomendaciones generales para la preparación de la superficie de mampostería a pintar. Se sugirió realizar este trabajo y la pintura con una temperatura ambiente entre10ºC y 35ºC; una humedad relativa ambiente máxima del 70%; y en condiciones favorables de viento y ausencia de lluvia.

El trabajo se alinea con las acciones que está llevando adelante el flamante programa RESTAURAR. Este espacio de trabajo interdisciplinario reúne numerosas capacidades que el INTI viene consolidando sobre la puesta en valor del patrimonio cultural, a fin de brindar una respuesta técnica integral. A futuro se prevé continuar asesorando al Ministerio de Cultura de la Nación en diferentes museos y edificios de valor cultural para el país.

«Los estudios y cateos realizado en las fachadas del MNBA, por el Área de Patrimonio Edilicio de la Dirección Nacional de Patrimonio y Museos del Ministerio de Cultura de la Nación y el INTI, toma importancia como resultado de un trabajo de colaboración entre instituciones, permitiendo aunar y optimizar recursos del Estado nacional. La experiencia de cada organismo garantiza que tanto los resultados de análisis obtenidos como los criterios de intervención recomendados respondan en forma eficiente a las necesidades del patrimonio«, concluyeron desde el Ministerio de Cultura.

Fuente > http://www.inti.gob.ar/