11.8.2004
El Kavanagh en el Fórum BCN 2004
Es un espacio cálido, oscuro.
Cada haz de luz detiene nuestro recorrido y nos transporta en el tiempo y en el espacio.
Estamos en la Sala 1 del Centro de Convenciones del Fórum BCN 2004. Un lugar de encuentro intercultural que a través de un destacado grupo de edificios en esquina de diferentes partes del mundo, nos sitúa, por un momento, en cada una de ellas.
Una esquina de Buenos Aires está aquí, ¡en Barcelona!
El Kavanagh fue seleccionado por el Comisario de la Exposición Don Manuel Solá-Morales y por el estudio de arquitectura que ha realizado el diseño de este espacio -BOPBAA-, para formar parte de las veinte obras más representativas en relación a esta temática. Se recorta, así, desde su rincón en Plaza San Martín y llega al Mediterráneo para compartir su majestuosa impronta con gentes de diferentes culturas. Nos permite disfrutar de un placentero sentimiento de pertenencia, estar, formar parte.
Es una esquina vital del porteño Barrio de Retiro.
Su consolidación dentro del paisaje urbano se debe no solo a la solidez de sus elementos constructivos y a su armonía compositiva, sino que, además, es el testimonio local de una época donde el Movimiento Moderno empezaba a ?filtrarse? con su espíritu de universalidad. Fue, durante varias décadas, el rascacielos más alto de Sudamérica. Para su construcción se utilizó la más avanzada tecnología del momento y los materiales de mejor calidad procedentes de diversas partes del mundo.
En un intento por poner de manifiesto el valor ciudadano de los lugares de encuentro y siendo la esquina su exponente natural dentro de la ciudad, el Fórum logra, a través de una muestra escenográfica, convertir la arquitectura en un atractivo de interés popular.
El Kavanagh exhibe aquí su aterrazado escalar hacia el cielo junto a ?La Pedrera? de Antoni Gaudí, la ?Loos Haus am Michaelerplatz? de Adolf Loos, el edificio ?Lleó Morera? de Lluis Doménech-Montaner, el ?Bonjour Tristesse? de Alvaro Siza y el ?Shizouka Press and Broadcasting Center? de Kenzo Tange, mencionando algunos de los edificios que conforman esta exquisita selección de obras que, desde los más diversos lenguajes arquitectónicos, se reúnen en un punto para dialogar, comunicar e intercambiar sensaciones.
Sólo en este espacio podemos encontrarlas, ya no hay esquinas en el territorio del Fórum, ya no se necesitan, el cruce entre los ciudadanos del mundo se da naturalmente.
La diversidad cultural, el intercambio, nace aquí y se expande por toda la ciudad, llegando hasta cada ciudadano, hasta cada navegante que busca desembarcar en la ?Ciudad de los prodigios?, en Barcelona.
Paola Mascioli