Anna Collection

Acababa de terminar mi carrera de Física y estaba comenzando el año de introducción en la Academia de Arte Gerrit Rietveld en Amsterdam cuando mi madre me pidió que diseñara una cabaña multifuncional para ella en su parcela forestal.

Sentí que la cabaña tenía que ser un lugar que nos conectara a tierra como familia. La muerte de mi padre nos había hecho flotar y buscar nuevas raíces en la realidad. Quería diseñar un lugar donde nos sintiéramos conectados y donde nos sintiéramos uno. Empecé a soñar con cómo podríamos estar rodeados de vida en lugar de estar protegidos de ella.

Me tomó 10 meses construir la primera versión de Cabin ANNA (entonces llamada Garden House). Y no tenía idea de lo que sucedería después de que lo terminara. Se publicaron algunas fotos y todo explotó. Dos cosas que cambiaron la vida han sucedido desde entonces gracias a la exposición. Primero, recibí una beca para estudiar en la Architectural Association (AA) en Londres. En segundo lugar, encontré a alguien (o más bien alguien me encontró a mí) que creía en ANNA. Este hombre, ahora un querido amigo, comenzó a proporcionar los medios para desarrollar aún más mi concepto. Siguieron dos eventos clave más que me permitieron desarrollar mi pensamiento sobre por qué construí ANNA en primer lugar. Descubrí al crítico de arquitectura y escritor Reyner Banham y conocí a la neurocientífica Margriet Sitskoorn.

Lo que construí inicialmente se basó puramente en la intuición, sin ningún conocimiento de arquitectura (y mucho menos teoría de la arquitectura). Todo empezó a tener más sentido mientras estudiaba en la AA, cuando descubrí a Reyner Banham. Según Banham, el desarrollo de la arquitectura comenzó con el fuego como la primera herramienta «arquitectónica» que usamos para crear una burbuja ambiental para mejorar las condiciones de vida. Fue el primer intento de los seres humanos en la manipulación de su entorno en uno más seguro y cómodo. Sin embargo, siendo seres humanos modernos, necesitamos un poco más que eso para sentirnos realmente como en casa. Necesitamos un refugio y acceso a recursos como agua y electricidad. Banham soñaba con crear un paquete de nivel de vida (un término que toma prestado de Buckminster Fuller), un kit (de alta tecnología) que incluye electrodomésticos existentes y nuevos que permiten una vida cómoda en la naturaleza. Una suerte de fire-kit 2.0, explícitamente sin necesidad de una pieza de arquitectura monumental adosada a él. Entonces me golpeó. Aunque ANNA podría ser lo contrario de lo que imaginaba Banham, sentí que había estado tratando de lograr lo mismo, solo que en una forma de baja tecnología. Construí un paquete de nivel de vida de baja tecnología, que permitiría una vida moderna conectada con la naturaleza. Una plataforma para vivir. Casi una maleta, que contiene elementos básicos como una cama, un baño, agua y alcantarillado, electricidad y por supuesto un fuego en el centro. Para hacer todo eso más cómodo bajo una amplia gama de condiciones climáticas, agregué los paraguas. Uno de vidrio, uno de madera, siempre listo y al alcance de la mano para ser utilizado como protección y comodidad cuando las condiciones lo requieran. No hay necesidad de una pieza arquitectónica monumental que nos aísle de nuestro entorno.

Cuando regresé a casa después de mis estudios en AA, conocí a Margriet Sitskoorn, profesora de neuropsicología clínica en la Universidad de Tilburg. Mi pensamiento evolucionó durante nuestras innumerables conversaciones. Pudo explicar por qué las capas deslizantes de ANNA, operadas por fuerza muscular, son tan importantes para el diseño. Su razonamiento es así. El cerebro está diseñado para comprender lo que podemos hacer con un objeto, en función de la interacción entre las propiedades del objeto y el sistema motor del cuerpo humano. Por lo tanto, el cerebro se “confunde” cuando el acto o movimiento del cuerpo no está alineado con la acción que se puso en marcha. Este suele ser el caso cuando interactuamos con dispositivos electrónicos como computadoras y iPhones. Entonces, digamos que si las capas de ANNA funcionaran electrónicamente, presionaría un botón con un dedo y, como resultado, una sección completa de 2500 kg comenzaría a deslizarse. Tu mente se ha fijado en el movimiento de un objeto, pero tu cuerpo apenas ha estado involucrado. Por lo tanto, el cuerpo y la mente no están alineados. Pero lo contrario también es cierto; cuando tu mente y tu cuerpo están alineados, fortalece la experiencia.

Cuando empujas las capas de ANNA con la mano, el cuerpo prepara la mente para abrirse y conectarse con el entorno natural. No son solo los límites físicos los que desaparecen, los límites psicológicos también se disuelven simultáneamente. Tu mundo interior y exterior se vuelven uno. Estás completamente inmerso en el momento. En términos del profesor Sitskoorn, nuestro pensamiento y sentimiento determinan nuestras acciones, pero nuestras acciones también determinan nuestro pensamiento y sentimiento. Esto se llama cognición incorporada. Y luego, cuando esté completamente inmerso en un entorno natural, su cerebro puede relajarse y entrar en el «modo predeterminado». En este estado de reflexión pueden ponerse en marcha experiencias trascendentes y procesos de recuperación, ambos esenciales para nuestra salud mental. Por ello, una vida cercana a la naturaleza, rodeada de un entorno que intuitivamente tenga sentido es fundamental para nuestro bienestar.

Con esta nueva perspectiva, continué construyendo y mejorando aún más el diseño original. Ahora hemos construido 10 ANNA. Cada uno es mejor que el anterior. Mejoramos el sistema deslizante para que sea fácil y seguro de operar a mano. También facilitamos el montaje y el desmontaje para que pueda mover ANNA en cualquier momento, convirtiendo la estructura en una herramienta que se puede usar en cualquier lugar y que se adapta a su entorno. Hicimos la cabina más duradera y cómoda en una gama más amplia de climas, introduciendo un mejor aislamiento y hermeticidad, sin comprometer la conexión con el medio ambiente. Otro paso importante para desarrollar aún más ANNA hacia un paquete de nivel de vida fue un alto grado de estandarización. Esto garantiza que la cabina se pueda manipular con facilidad y se pueda fabricar en las principales máquinas CNC y ensamblar por cualquier persona (sin mano de obra calificada), en cualquier parte del mundo. También inventamos más características como una cama y un baño que se pliegan y emergen de la plataforma. Todas estas características se operan a mano para aumentar la interacción con la cabina y el entorno. A partir de un concepto que creé intuitivamente, convertimos a ANNA en un «paquete de nivel de vida» real que le permite vivir de manera diferente. Una auténtica herramienta para que hagas de cualquier lugar de la naturaleza tu hogar.

El verano pasado creamos nuestra décima ANNA: Colección ANNA. Junto con mi equipo, trabajé en refinar cada detalle. Ese pequeño borde allí, la transición aquí, cómo abres y deslizas ese elemento, qué sientes cuando tocas cada superficie natural. La combinación de mecánica en movimiento y materiales que se unen forman un todo equilibrado. ANNA Collection es mi mejor trabajo hasta ahora.

Ahora estamos listos para producir nuestras primeras colecciones ANNA. Para las primeras 10 Colecciones ANNA, estamos en conversación con personas que tienen ubicaciones únicas en todo el mundo. Personas que reconozcan y aprecien cada detalle y que anhelen conectarse con la naturaleza como lo hacemos nosotros. Personas que quieran ayudarnos a difundir nuestra historia y ser uno de nuestros socios fundadores.

Construiré personalmente estos primeros 10 ANNA junto con mi equipo. Nos aseguraremos de que esté perfectamente construido y una vez terminado, firmaré para confirmar. ANNA Collection solo viene con opciones completas: baño en el piso, cama en el piso, dormitorio en el altillo, baño de lujo, ducha exterior, grifería de alta gama y cocina totalmente equipada.

Junto a ANNA Collection, hemos estado trabajando en ANNA One. ANNA One se basa en la misma filosofía, la misma alta calidad, pero despojada de la esencia. ANNA One viene con la opción de pedir un paquete completamente plano y ensamblarlo usted mismo. Muy parecido a un kit de construcción de modelos a escala 1: 1. Suministramos un conjunto de instrucciones detalladas para que pueda ensamblar todos los elementos modulares, que normalmente se ensamblarían en nuestro taller de madera, usted mismo.

El baño y la cocina serán opcionales para ANNA One. Esto le permite tomar sus propias decisiones e instalar su propia cocina o baño si lo prefiere. Al permitir que las personas construyan ANNA con su propia fuerza muscular, damos un paso más en la interacción entre el ser humano, el entorno y la cabina, en línea con la teoría de Sitskoorn.

Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/anna-collection.html