Adición al Museo de la Abadía de Novacella

Fundada en 1142 y enclavada en la cuenca bordeada de viñedos del valle de Eisack, cerca de Bressanone (Italia), la abadía no solo representa uno de los conjuntos arquitectónicos más importantes del Tirol del Sur en la actualidad, sino que también se erige como una abadía agustiniana preeminente de su época. Como un pequeño pueblo autosuficiente, cada edificio dentro del conjunto del monasterio desempeñó un papel específico: las iglesias, capillas, molinos, talleres, bodegas y masías constituyentes formaron un núcleo indeleble, del cual solo una parte se ha convertido en un museo. .

Nuestra nueva incorporación ayuda a orientar a los visitantes a los terrenos de la Abadía y participa en su historia estratificada, planteando nuevas posiciones y nuevos vocabularios con un lenguaje arquitectónico respetuoso tanto del pasado como del futuro. — afirma Matteo Scagnol, cofundador con Sandy Attia de MoDusArchitects

La adición de MoDusArchitects inyecta nuevas funciones en los edificios antiguos y reconfigura las relaciones entre las estructuras auxiliares y los edificios principales de la Abadía. Desde el exterior, el proyecto solo es evidente por el puente revestido de cobre ennegrecido que emerge de un grupo de edificios de servicios reconstituidos que se conectan con el claustro principal en el nivel superior.

Parte de demolición, parte de renovación y parte de restauración, el proyecto interviene en tres estructuras secundarias adyacentes en el contexto del ala del siglo XVII del claustro principal. El primer edificio se destruye para transformar el almacén agrario en el espacio aireado de doble altura del atrio de entrada con un entrepiso con vistas. El segundo edificio, por otro lado, reemplaza el lavatorio de un piso demolido con una escalera de barrido y una torre de ascensor que une el ala antigua del claustro. La tercera y última estructura se renueva para albergar un espacio para seminarios y eventos en la planta baja con un patio al aire libre recién configurado y un espacio para exposiciones temporales y una sala de coro en el nivel superior.

El nuevo atrio presenta el mostrador de boletos, vitrinas y accesorios de iluminación hechos a la medida, cuyos detalles articulados de cobre, madera y vidrio crean nuevas conversaciones dentro de los aleros recién expuestos del techo de madera inclinado restaurado y el trabajo de yeso tallado en bruto.

Los visitantes salen del vestíbulo de entrada y se dirigen al aire libre para comenzar su recorrido en el claustro de la abadía, el itinerario serpentea a través del monasterio, pasando por la biblioteca del siglo XVIII y una sala con frescos del siglo XVII recientemente restaurada para luego concluir el circuito volviendo a la nueva adición en el nivel superior, en la parte superior de la escalera. De esta manera, el proyecto de MoDusArchitects es tanto el punto de partida como el punto de llegada de la secuencia del museo. Completando la visita al museo y pasando más allá de los antiguos muros de la Abadía hacia el espacio del nuevo puente, una gran ventana proporciona una liberación visual: una vista en escorzo sobre la azotea del almacén renovado retrocede a la capilla de Sant’Angelo para orientarse, al mismo tiempo que ofrece vistas privilegiadas al jardín amurallado de la Abadía y los viñedos más allá.

Muros de hormigón a la vista, abujardados, suelos de hormigón con acabado de llana y carpintería de castaño grueso proporcionan un telón de fondo táctil para llevar la secuencia espacial al punto de partida de vuelta a las escaleras en cascada que conducen al atrio una vez más. Los elementos arquitectónicos se mantienen unidos en un equilibrio atmosférico de tonos sutiles y materiales naturales; el uso medido de una paleta de diseño limitada brinda una sensación de serenidad en la que lo nuevo y lo antiguo se reconcilian a través de detalles discretos, ya sea desde el parapeto de la escalera, la ventana, hasta el acabado de las superficies verticales y horizontales.

El proyecto se acompaña de las intervenciones artísticas de Paul Renner, cuyas interpretaciones románticas y lúdicas del hortus sanctis augustini crean un compañero caprichoso de la sobriedad de los interiores. El pintoresco recorrido de Renner sobre el patrimonio botánico de la Abadía se desarrolla a lo largo del revestimiento de metal de la torre del ascensor a medida que los visitantes descienden desde el nivel superior del claustro hasta el vestíbulo de entrada.

El trabajo de MoDusArchitects aborda la heterogeneidad de los diferentes períodos arquitectónicos de la Abadía de Novacella con un enfoque incisivo que combina vocabularios históricos y contemporáneos en un todo equilibrado. El diseño de la secuencia de espacios y sus mensajes hápticos y táctiles de vacío, el paso del tiempo y las cualidades más efímeras que solo el visitante puede experimentar, trasladan todo lo que ofrece la Abadía hacia el futuro.

Leé la nota original en inglés > https://arqa.com/en/architecture/infonovacella-abbey-museum-addition.html