Edificio Moneda Bicentenario

El Edificio Moneda Bicentenario, resultado de una licitación pública ganada por el Consorcio RSN, se estudió desde un comienzo como un edificio público contemporáneo relevante, con una propuesta innovadora y ambientalmente eficiente, en el contexto del Barrio Cívico de Santiago, acogiendo estrictamente los parámetros propuestos por la Normativa Vigente, desarrollados por la Municipalidad de Santiago, en un proceso liderado por la Dirección de Arquitectura del MOP.

Un volumen simple, prismático, de once pisos de altura, recoge en todas sus caras las líneas oficiales y alturas dictadas por las ordenanzas. La esquina propuesta por la ordenanza municipal se reinterpretó conformando un retranqueo que, en combinación con un pórtico público propuesto para la calle Moneda, conforma una vereda de cierta holgura en la esquina de calle Moneda y Teatinos.

El Conjunto está regulado por una trama en base al módulo generado por las fachadas de 20 pies, equivalentes a 610 cm. La altura entre pisos, de cuatro metros, se ha proyectado en estricta coincidencia con los niveles de los edificios del Barrio Cívico. En el Interior, libre de las restricciones normativas, se propone un sistema de atrios y patios donde la homogeneidad y las posibilidades formales de esta trama aparecen en su máxima expresión, un diseño que optimiza los sistemas de iluminación, ventilación, e instalaciones, en un sistema de mantención energéticamente eficiente,  de acuerdo a parámetros de Certificación Actuales.

La parte central de la trama, vaciada en diferentes espacios conectados a través de toda su altura, permite alojar los programas especiales del nuevo edificio, quedando este sistema principal rodeado de plantas libres disponibles para las oficinas regulares. Este sistema se combina con un núcleo de circulaciones y servicios ubicado al centro/sur de la planta. En los casos en que una repartición ocupa más de un piso, se han dispuesto escaleras que comunican los patios directamente, sin necesidad de dirigirse al núcleo central de comunicaciones.

Las condiciones ambientales para el edificio están sustentadas por la arquitectura, que conforma un diseño pasivo complementado por un sistema activo eficiente. La propuesta tiene sus bases en el clima de Santiago y las condiciones específicas del terreno. El diseño general de la propuesta se sustenta en dos aspectos esenciales de la misma: la envolvente que conformada por fachadas masivas con gran inercia térmica y espacios interiores abiertos que conforman ambiente interior de espacios intermedios. Ambos elementos sustentan en su conformación formal no sólo las cualidades estructurales, simbólicas y funcionales del edificio, sino al mismo tiempo las condiciones ambientales y bioclimáticas.

Los vacíos interiores introducen al interior del edificio aire limpio renovado y actúan como intermedio entre el exterior y los interiores propios del Ministerio. A través de estos espacios se inyecta desde arriba aire limpio a la temperatura y humedad adecuada, este aire entra directamente en cada piso a los espacios de trabajo y es succionado a través de ductos en los extremos de las plantas y llevado al sistema de tratamiento que se encuentra en el piso 11º. De esta manera sólo hay ductos de extracción de aire en el perímetro de las plantas.

Se propone una cubierta verde en los pisos décimo y onceavo, como un jardín en extensión, con jardineras de poca profundidad de mínima mantención, capaces de disminuir la radiación, absorber los polvos en suspensión y retener el agua Lluvia.

La envolvente del edificio está definida por la importante masa de las fachadas, la que aporta inercia térmica al sistema pasivo de confort ambiental, por lo tanto las zonas de hormigón se proponen con un mínimo aislamiento. El sistema de aventanamiento consta de perfiles de aluminio con doble contacto y rotura de puente térmico, y vidrios Dobles con un mínimo coeficiente de sombra. El ancho de las crujías, así como la altura libre de piso a cielo propuestas, permite que todos los puestos de trabajo reciban luz natural y gocen de vistas hacia el exterior, combinada con un sistema de iluminación artificial donde se privilegió la calidad de los equipos, reduciendo su número, pero aumentando su eficiencia.