Piscina K, en Bélgica

Cuando el contratista estaba por comenzar las obras, un edificio escolar abandonado, junto a su jardín, se puso en venta. El propietario no dudó un instante. Las obras se detuvieron y el edificio de la escuela fue comprado. Después de muchos análisis e intensas discusiones, se decidió realizar primero la piscina.

Piscina con vistas
No sólo había que tener en cuenta el tamaño y la desfavorable orientación del jardín, también los aspectos constructivos determinaron su ubicación: no se podía instalar la piscina en el pequeño jardín sin sol, pero sí en la azotea del edificio de la vieja escuela. Una estructura de columnas y vigas de hormigón armado, construida en el interior de los muros exteriores, permitió su construcción y sirvió además como refuerzo estructural del edificio de la escuela abandonada. La planta baja alberga una cocina al aire libre, mientras que el espacio en la primera planta es polivalente.

Sensación de libertad
En la azotea, el parapeto, los pisos, las escaleras y la piscina están acabados en un revestimiento blanco de poliurea. El acabado blanco sin juntas, junto con el agua azul celeste, crean un ambiente zen. La maravillosa vista del paisaje y su entorno desde la azotea aumenta la sensación de vacaciones y de libertad. ¿Quién no querría poder nadar después de un ajetreado día de trabajo con una impresionante vista a la basílica?

Visitá el texto original en inglés > http://bit.ly/1dhaEfc