Viviendas Kavel

El proyecto Kavel es un ejercicio de viviendas de pequeña escala, siguiendo los principios tradicionales. La compañía busca oportunidades dentro de la trama urbana para construir nuevas viviendas, ya sea individualmente o en grupos que van desde dos o tres hasta siete u ocho.

Cuatro casas se proyectan. A primera vista son cuatro casas idénticas, pero no lo son. No sólo se diferencian las parcelas, las familias tampoco se parecen. Una cosa estas casas tienen en común, y es que fueron diseñados pensando en el corte, en lugar de la planta. El ejercicio se ajusta a los parámetros reales de desarrollo en aquellos sitios que se encuentran en un centro urbano: múltiples pisos estrechos, pero profundos. La actividad de la vivienda se organiza verticalmente. El principal problema que esto plantea es cómo llevar la luz del día hasta los pisos inferiores.

Casa W surge de apilar habitaciones y es de color blanco puro. La altura de apilamiento adoptado, hace que sea posible reducir a la mitad la profundidad de la vivienda. Esta forma está rodeada por un cerco, que deja espacio para un jardín delantero y un jardín trasero, con el volumen construido en el centro. Casa M fue la primera de una serie de casas que surgieron como un ejercicio de la materialidad de la cáscara. Casa A continúa con el ejercicio. La cáscara sí proporciona color, con sus ladrillos color terracota. Se alterna con el color constante de bloques de hormigón con vigas y pisos de madera y paredes blancas. El juego puro de la luz es de suma importancia. Casa T es una de las cuatro casas que tiene que hacer frente a un sitio extraño, llegando a un punto al fondo del jardín.

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