Conversión de una antigua nave industrial a vivienda unifamiliar, en Tárrega

Estado Original
La nave original ocupa la totalidad de un solar situado en la calle Ardècol 13, que tiene una planta rectangular de 9’4×17’5m2 y una superficie de 164’95m2. El acceso principal se hace desde la calle, por el lado Este de la parcela que es la única que tiene aberturas al exterior. La edificación es sencilla, ya que se trata de una antigua fábrica donde lo que prevalecía era el espacio y consta de cuatro muros perimetrales de sillares sobre los que descansan las cerchas de madera que sustentan la cubierta con estructura de madera, enlistonado de madera y acabado de teja árabe. Interiormente presenta un amplio espacio diáfano, sin ninguna divisoria interior, de unos 7m de alto, llegando hasta casi a los 9 metros en la cumbrera de cubierta. El suelo presenta una pendiente interior más o menos constante y hay un cambio de nivel de unos 20cm más bajo en la parte opuesta a la fachada de acceso, con una nivelación irregular y con trazas de la antigua actividad industrial.

Descripción general
Se plantea la rehabilitación integral del edificio, se sanea la estructura y se restaura la cubierta. La intervención no implica una modificación del volumen: todo queda dentro de los límites definidos por la nave original.

Se levanta el suelo, se nivela y se impermeabiliza. La cubierta se desmonta íntegramente intentando recuperar al máximo las tejas. Se sanean las cerchas y las vigas auxiliares y se rehace la cubierta inclinada de la teja árabe, con una nueva lámina impermeabilizante y aislante. El espacio interior se divide en altura en tres partes mediante forjados de chapa grecada y chapa de hormigón. Se adaptan las aberturas de la fachada a la calle y a la nueva distribución, reduciendo la importante puerta de acceso de camiones, desplazando la puerta de acceso de peatones y ampliando las ventanas existentes. Se sanean los tramos que se mantienen, cosiendo grietas, regularizando aberturas y fijando piezas sueltas.

En el proceso de definición del espacio interior, una de las grandes apuestas del proyecto, es disponer de un patio de 3’60×7’5m2 que parte los más de 17 metros de profundidad del edificio, creando una gran fachada interior, para favorecer la ventilación cruzada y la entrada de luz natural cruzando las tres plantas en las que se divide el espacio interior. Las escaleras y el ascensor, configuran el nudo de comunicación vertical entre la planta baja de acceso y servicios, la primera planta y principal de la vivienda y, la segunda planta donde se sitúa la suite principal y el estudio sobre el doble espacio de la cocina-comedor.

Programa funcional
La planta baja se concibe como una planta de acceso y servicios. Está el acceso de peatones y de vehículos desde la calle. El aparcamiento comunica con una sala de instalaciones donde se encuentra la caldera, acumuladores y otros servicios del edificio, y a través de una puerta se llega al recibidor, al cual da la puerta de acceso principal desde la calle. Del recibidor deriva un paso que bordea el patio interior y que permite llegar a una sala diáfana utilizable como trastero o sala de juegos. Varias ventanas y balcones permiten la iluminación de estas dependencias gracias al nuevo patio interior. Dos comunicaciones nos conducen a la primera planta, una interior, por la escalera del recibidor del acceso y una exterior, por la escalera situada en el patio interior.

La primera planta se plantea en dos zonas separadas por el volumen del patio. La zona de día se plantea en la parte Este de la casa, y es el espacio donde desemboca la escalera interior de la planta inferior y que da a la calle. Se trata de un rectángulo de 8’8×7’5 metros donde convergen sala, cocina y comedor con un espacio único sin divisiones, con ventilación cruzada de la fachada principal al patio interior. A través del paso que bordea el patio se llega al distribuidor de la zona de noche que da acceso a dos habitaciones y a un baño compartido. La escalera exterior proveniente del patio, desemboca a través de una plataforma de eco tarima que permite el acceso a la planta. La zona de intercomunicación día-noche da lugar al arranque de la escalera que lleva a la planta segunda. Esta planta presenta dos particularidades, tiene dos niveles y no ocupa toda la planta. El hecho de los dos niveles es debido a la necesidad de permitir la circulación por debajo de las cerchas de madera actuales.

Esto se ha resuelto haciendo un plan de llegada de la escalera inferior, que distribuye por debajo del nivel de las cerchas hasta el estudio y hacia la habitación principal que dispone de baño propio. Ambos espacios están en un nivel superior al cual se accede mediante tres escalones más. El estudio ocupa más de la mitad del espacio de la sala-comedor interior, creando un doble espacio que permite la circulación de la luz y la ventilación del conjunto. Además de las ya comentadas escaleras de comunicación entre plantas, se prevé una comunicación vertical mediante un ascensor para poder acceder a casa con compras pesadas o permitir el acceso a personas con movilidad reducida.